El municipio de Villeta, en Cundinamarca, enfrenta un nuevo remezón político tras conocerse la decisión del Consejo de Estado que anuló la elección de Yosimar Reyes Parra como alcalde, argumentando que incurrió en una inhabilidad que le impedía aspirar al cargo.
De acuerdo con el fallo de la Sección Quinta de la alta corte, Reyes Parra estaba impedido para ser candidato debido a que, antes de inscribirse para la contienda electoral de octubre de 2023, ejerció autoridad civil y administrativa como presidente de la Junta Administradora Local (JAL) del barrio San Miguel, en el municipio de Villeta.
Según el alto tribunal, ocupar esa posición dentro del año previo a la elección constituyó una inhabilidad expresa, conforme a lo establecido en el artículo 95 de la Ley 136 de 1994, el cual señala que quienes hayan ejercido autoridad civil, política, administrativa o militar dentro del respectivo municipio no podrán ser elegidos alcalde.
El caso llegó a manos del Consejo de Estado después de que un ciudadano interpusiera una demanda de nulidad electoral, alegando la presunta inhabilidad. El Tribunal Administrativo de Cundinamarca ya había fallado en primera instancia a favor de la demanda, y ahora, la decisión fue ratificada en segunda y definitiva instancia.
Con la anulación de su elección, Reyes Parra perderá la investidura y su cargo quedará vacante mientras se surte el proceso para designar a un nuevo mandatario local. Se espera que, en las próximas horas, la Gobernación de Cundinamarca nombre un alcalde encargado mientras se define si se convoca a elecciones atípicas para completar el período constitucional.
Este caso se suma a otras decisiones recientes que han puesto la lupa sobre los procesos electorales en municipios del país, recordando a los candidatos y partidos políticos la importancia de verificar el cumplimiento estricto de los requisitos y causales de inhabilidad antes de participar en elecciones.
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