A partir de este lunes 25 de agosto, el Hospital San Félix anunció que suspenderá la prestación de servicios a los afiliados de la Nueva EPS, excepto urgencias y primer nivel de atención. La medida se debe al incumplimiento reiterado de la entidad y a una deuda acumulada que asciende a 26 mil millones de pesos, según confirmó la gerencia del hospital.
La situación no solo impacta a los usuarios en La Dorada, sino también a toda la región del Magdalena Centro, que depende en gran parte de este centro asistencial para acceder a servicios de mediana y alta complejidad.
El gerente del Hospital San Félix, César Augusto Rincones Sánchez, manifestó que se han buscado soluciones y acuerdos con la Nueva EPS, pero no se ha recibido respuesta ni un solo recurso económico en lo corrido del mes. “La responsabilidad de esta crisis recae directamente en la Nueva EPS, que ha incumplido de manera sistemática con sus obligaciones”, señaló.
Afectaciones en la región y otros casos similares
La decisión del Hospital San Félix no es un hecho aislado. En Manizales, la Clínica Avidanti también anunció la suspensión de servicios a los usuarios de la misma EPS, lo que refleja la gravedad de la crisis en el sistema de salud y la falta de garantías para los hospitales y clínicas en el cumplimiento de pagos.
Preocupación en la comunidad
Los usuarios expresan su preocupación por el impacto que esta decisión tendrá en la atención en salud. Si bien los servicios de urgencias y primer nivel seguirán funcionando con normalidad en el Hospital San Félix, la suspensión de los demás servicios representa un riesgo para pacientes que requieren tratamientos especializados, hospitalizaciones o procedimientos quirúrgicos.
La comunidad teme que el acceso a la salud en la región se vea aún más limitado, mientras las instituciones insisten en que la continuidad de la atención depende exclusivamente de la responsabilidad de la Nueva EPS.
